Es un imperativo para el Misionero de Cristo Resucitado continuar con la presencia salvadora y transformadora de Jesucristo en el mundo: amando, curando, sirviendo, siendo voz de los que no tienen voz, sabiendo que sus destinatarios son todos hombres y mujeres desesperanzados, golpeados por la cultura de muerte que invade a nuestro pueblo, preferencialmente a los que se encuentran en absoluto abandono y extrema pobreza.
“Todo lo que tenga que ver con Cristo tiene que ver con los pobres y todo lo relacionado con los pobres reclama Jesucristo”
Por lo tanto el Misionero de Cristo Resucitado esta llamado a contemplar en los rostros de nuestros hermanos, el rostro de Cristo.
Esto, lo impulsa a buscar nuevos caminos para promover y reintegrar la dignidad de la persona.
El Misionero de Cristo Resucitado comparte el pan con el hambriento, abre su casa al pobre sin techo, viste al desnudo, sacia la necesidad del humillado, renuncia a oprimir a los demás, destierra la palabra ofensiva y el gesto amenazador. Jamás da la espalda a ningún hermano.
(Cf. Mt 5, 3-12; 6, 33-34; 25, 31-40; Is 58, 7-10).
Para ejercer su acción apostólica, el Misionero de Cristo Resucitado tiene como fuente por excelencia, las Bienaventuranzas (Cf. Mt 5, 3-12). Son su guía y su parámetro. Por lo tanto, lo llevan a encarnarse con los más pobres y a responder a los signos de los tiempos siendo promotor de la vida en medio de una cultura de muerte.

"Alabado sea Cristo Resucitado, Ahora y Siempre"

Sobre nosotros

El fin de los Misioneros de Cristo Resucitado es ser signo de la Certeza de la Resurrección viviendo en Obediencia, Pobreza y Castidad, en un amor preferencial por los pobres, buscando siempre el desarrollo integral de sus miembros y viviendo en una auténtica vida de fraternidad.

Nuestra misión está inspirada en la misma misión de Jesús.

El Espíritu del Señor sobre mí, porque me ha ungido para anunciar a los pobres la Buena nueva, me ha enviado a proclamar la liberación a los cautivos y la vista a los ciegos, para dar libertad a los oprimidos y proclamar un año de gracia del Señor (Cf. Lc. 4, 18-19).

Nuestra Misión está Basada en las Bienaventuranzas (Cf. Mt. 5, 1-12), impulsada con la Certeza de la Resurrección y Orientadas con la Doctrina Social Cristiana.

– NMF Bertha López Chávez.

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